Cuatro opiniones, cuatro columnas. La historia de Vilcabamba, un espacio histórico ideal para esconderse; la discriminación de discapacitados mentales en el país; la historia de una niña que necesitaba una operación y sufrió la incapacidad de un grupo de médicos para realizar un aborto terapéutico y la crítica de un libro de Vargas Llosa que habla sobre el efecto de las nuevas tecnologías de la comunicación en la cultura.

El profesor e historiador, Antonio Zapata, cuenta en su columna publicada en  La República la historia de la selva de Vilcabamba, espacio donde se realizó la búsqueda del camarada "Gabriel". Zapata narra que desde la época incaica y en la conquista española, este era un espacio de escondite ideal para los incas debido a su geografía. Hoy ocurre algo similar por el grupo senderista y afirma que "si la geografía y los locales son adversos, sólo la inteligencia puede obtener la victoria."

El editorial de El Comercio de hoy, cuestiona el rol del Estado y nuestro sistema legal para con los discapacitados mentales, a quienes considera que su inclusión no responde un comportamiento "justo". Señalan que existen tres contextos dramáticos en los que la discriminación ocurre: el internamiento forzoso, exclusión de voto y las esterilizaciones forzadas que se realizan a los denominados "incapacitados mentales".

El periodista Jerónimo Centurión, da su opinión en su columna publicada en Diario 16 sobre la ejecución de la ley del aborto terapéutico aprobada hace 88 años bajo la óptica de la  historia de "Rosa". Una niña de 13 años violada y embarazada que no pudo ser operada de la columna a tiempo porque un grupo de médicos no quisieron realizarle un aborto terapéutico. Centurión opina que la ley se aprobó en 1924, "pero la Iglesia, desde diferentes flancos, ha impedido que los médicos actúen".

Finalmente, el periodista y bloggero, Marco Sifuentes, recomienda en su columna publicada en La República la lectura del último libro de Mario Vargas Llosa, "La civilización del espectáculo". Indica que el autor desafía las convicciones y convenciones de su época. El nobel reta la idea del progreso de la humanidad basado en el avance de las tecnologías de la comunicación. En su columna, Sifuentes resalta la visión "apocalíptica que tiene el autor de la masificación". El nobel declara que mientras "más inteligente es nuestro ordenador, más tontos seremos". Sifuentes, por su parte, resalta que las comunicaciones han permitido que todos tengan una voz y no sólo la "élite". Internet acoge a todos.